Hoy por diferentes motivos, una y otra vez, esta fotografía que realicé en la zona Arcade, en Julio del 2017, no paraba de rondar mi inquietante cabeza. Sé la razón, y es que indirectamente la vinculo con motivos personales, que no vienen a cuento y no voy a desvelar. Pero lo que si me apetecía mucho, era contar, la pequeña historia detrás de la fotografía. Es curioso, y comentado con otros fotógrafos, y es similar la experiencia; después de muchos miles de fotografías realizadas, sin dudar somos capaces de reconocer una fotografía propia, y rememorar todas las sensaciones que experimentamos, en el transcurso de la toma de la fotografía. Y esta es una de las muchas razones, de mi pasión, por este mundo de la fotografía. Estaba viajando con un grupo de Martinica por nuestra querida Galicia, y en un desplazamiento por nuestros bosques, haciendo una ruta de senderismo, nos encontramos con esta maravillosa piscina natural. Una de las cosas que rápidamente aprendes en este tipo de viajes, es a realizar las cosas, la primera vez que tengas oportunidad, por que luego lo más probable es que no haya otra oportunidad, y te encuentres en la circunstancia de no volver a vivir nada similar. La gente busca destinos exóticos y de cultura y no hace más que salir de Galicia, y no se da cuenta de las maravillas que tenemos en esta hermosas Tierra, de hecho las 30 personas del grupo de Martinica que eran experimentados senderistas, no dejaron de sorprenderse durante todo el viaje con imágenes como esta.
